La Ley de Navegación y Comercio Marítimos dispone que el transporte de mercancías en aguas mexicanas está reservado a propietarios y embarcaciones mexicanas.
En México, más del 90% de la actividad marítima se relaciona con la extracción y exploración de petróleo en aguas someras. Las operaciones petroleras en el mar requieren embarcaciones para trasladar insumos, productos y personas entre las plataformas petroleras y la costa.
En este contexto, marinos mercantes asociados en la Cámara Mexicana de la Industria del Transporte Marítimo (CAMEINTRAM) denunciaron prácticas de competencia desleal y solicitaron igualdad de condiciones en la prestación de estos servicios marítimos esenciales para el sector Oil & Gas.
El director general de la CAMEINTRAM, Armando Rodríguez, afirmó que desde hace una década incrementaron las navieras extranjeras que prestan servicios de transporte en costas mexicanas con esquemas corporativos de simulación y que generan una competencia desleal en este sector altamente “petrolizado”. “No tenemos miedo a la competencia, lo que sí tenemos que combatir es la competencia desleal”, aseguró.
La Ley de Navegación y Comercio Marítimos dispone que el transporte de mercancías en aguas mexicanas está reservado a propietarios y embarcaciones mexicanas. Sin embargo, se han constituido firmas que promueven una competencia desleal pues han hecho cabotaje, transporte de personas, mercancías y equipajes sin atender la ley que reserva esta actividad a compañías nacionales.
La CAMEINTRAM, el organismo empresarial que agrupa y representa los intereses y necesidades del sector marítimo en México, condenó estos esquemas que afectan al transporte marítimo nacional que es clave no sólo para la exploración y extracción de petróleo sino además para el transporte de carga y pasajeros con fines turísticos o comerciales.
Un caso emblemático es el de la naviera Hornbeck Offshore Services México (HOS), en el que la justicia mexicana determinó recientemente que simuló un esquema de operación donde aparentó estar en manos de mexicanos, por lo que, tras una investigación y un litigio, la Secretaría de Marina suspendió sus permisos en el Registro Público Marítimo Nacional.