Irak, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí anuncian la continuación de recortes en la producción de petróleo, apoyando la estabilidad del mercado.
Varios miembros de la OPEP+, incluyendo a Irak, los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, anunciaron este domingo su decisión de prolongar la disminución voluntaria en su producción petrolera para el segundo trimestre del año, siguiendo los pasos previamente anunciados por Kazajistán y Rusia.
El Ministerio de Petróleo de Irak divulgó hoy mediante un comunicado que mantendrá su reducción voluntaria en 220 mil barriles diarios, hasta el final del segundo trimestre del año en curso, en colaboración con otros países miembros de la OPEP+.
Este anuncio fue difundido por la agencia de noticias estatal iraquí, INA, que además precisó que esta medida limitará la producción iraquí a 4 millones de barriles diarios hasta finales de junio de 2024, planificando una recuperación gradual de la producción recortada basada en las condiciones del mercado.
De igual manera, Arabia Saudita confirmó hoy su intención de reducir su producción petrolera en un millón de barriles durante el mismo intervalo, alcanzando una producción de nueve millones de barriles diarios hasta el término de junio, según informaciones atribuidas a una fuente del Ministerio de Energía del reino por la agencia oficial SPA.
Por otro lado, los Emiratos Árabes Unidos anunciaron una reducción en su producción de 163 mil barriles diarios hasta la conclusión de junio, momento para el cual su producción diaria se situará en 2.9 millones de barriles.
Ya en abril de 2023, Irak, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos habían notificado reducciones voluntarias en su producción de 211 mil, 500 mil y 144 mil barriles diarios, respectivamente, alineándose con las acciones de otros países de la organización.
La finalidad de esta medida colectiva es “fortalecer las iniciativas preventivas de los países de la OPEP+ en favor de la estabilidad y el equilibrio del mercado petrolero”, mientras se planifica una recuperación escalonada de la producción acorde a las dinámicas del mercado.
Irak, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí anuncian la continuación de recortes en la producción de petróleo, apoyando la estabilidad del mercado.
Varios miembros de la OPEP+, incluyendo a Irak, los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, anunciaron este domingo su decisión de prolongar la disminución voluntaria en su producción petrolera para el segundo trimestre del año, siguiendo los pasos previamente anunciados por Kazajistán y Rusia.
El Ministerio de Petróleo de Irak divulgó hoy mediante un comunicado que mantendrá su reducción voluntaria en 220 mil barriles diarios, hasta el final del segundo trimestre del año en curso, en colaboración con otros países miembros de la OPEP+.
Este anuncio fue difundido por la agencia de noticias estatal iraquí, INA, que además precisó que esta medida limitará la producción iraquí a 4 millones de barriles diarios hasta finales de junio de 2024, planificando una recuperación gradual de la producción recortada basada en las condiciones del mercado.
De igual manera, Arabia Saudita confirmó hoy su intención de reducir su producción petrolera en un millón de barriles durante el mismo intervalo, alcanzando una producción de nueve millones de barriles diarios hasta el término de junio, según informaciones atribuidas a una fuente del Ministerio de Energía del reino por la agencia oficial SPA.
Por otro lado, los Emiratos Árabes Unidos anunciaron una reducción en su producción de 163 mil barriles diarios hasta la conclusión de junio, momento para el cual su producción diaria se situará en 2.9 millones de barriles.
Ya en abril de 2023, Irak, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos habían notificado reducciones voluntarias en su producción de 211 mil, 500 mil y 144 mil barriles diarios, respectivamente, alineándose con las acciones de otros países de la organización.
La finalidad de esta medida colectiva es “fortalecer las iniciativas preventivas de los países de la OPEP+ en favor de la estabilidad y el equilibrio del mercado petrolero”, mientras se planifica una recuperación escalonada de la producción acorde a las dinámicas del mercado.