Gabriela Siller destaca la necesidad de descongelar la reforma energética y cambiar el modelo de negocio de Pemex para atraer inversión y mejorar su situación financiera.
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Grupo Financiero Base, ha enfatizado la necesidad de descongelar la reforma energética y cambiar el modelo de negocio de Petróleos Mexicanos (Pemex) para atraer las inversiones necesarias para el país. La situación de Pemex es insostenible debido a su elevada deuda y la pérdida de su grado de inversión por parte de las agencias calificadoras.
Siller sugiere que permitir la entrada del sector privado para hacer inversiones podría ser un paso hacia la solución, esencialmente descongelando la reforma energética. Otra opción sería la venta de activos, como la refinería de Deer Park, para mitigar las amenazas a las finanzas públicas y la calificación crediticia del país.
Desde el inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, la calidad crediticia de Pemex ha caído significativamente. Según datos de julio de 2024, Fitch Ratings y Moody’s han clasificado la deuda de Pemex como Altamente Especulativa, mientras que S&P Global la mantiene en Grado Medio Inferior, aunque con un descenso de un escalón. Específicamente, Moody’s ha degradado a Pemex de ‘Baa3’ a ‘B3’ con perspectiva Negativa, y Fitch Ratings la ha rebajado de ‘BBB+’ a ‘B+’ en el mismo periodo. Fitch y S&P mantienen una perspectiva “Estable”.
Siller destaca que sin un grado de inversión, Pemex enfrenta dificultades significativas para obtener financiamiento, o solo puede acceder a tasas muy altas. Como resultado, la administración de López Obrador ha destinado recursos federales para rescatar a Pemex, incluyendo 952 mil millones de pesos entre 2019 y abril de 2024, de los cuales 561 mil millones se han utilizado para el pago de deuda.
Con una deuda de 101.5 mil millones de dólares al cierre del primer trimestre de 2024, la administración de Claudia Sheinbaum Pardo enfrentará el desafío de recaudar 1 billón 371 mil millones de pesos en aportaciones patrimoniales y reducir el Derecho por la Utilidad Compartida (DUC) para Pemex. Siller subraya que estos recursos deberán complementarse con inversión privada para ser efectivos.
Gabriela Siller destaca la necesidad de descongelar la reforma energética y cambiar el modelo de negocio de Pemex para atraer inversión y mejorar su situación financiera.
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Grupo Financiero Base, ha enfatizado la necesidad de descongelar la reforma energética y cambiar el modelo de negocio de Petróleos Mexicanos (Pemex) para atraer las inversiones necesarias para el país. La situación de Pemex es insostenible debido a su elevada deuda y la pérdida de su grado de inversión por parte de las agencias calificadoras.
Siller sugiere que permitir la entrada del sector privado para hacer inversiones podría ser un paso hacia la solución, esencialmente descongelando la reforma energética. Otra opción sería la venta de activos, como la refinería de Deer Park, para mitigar las amenazas a las finanzas públicas y la calificación crediticia del país.
Desde el inicio de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, la calidad crediticia de Pemex ha caído significativamente. Según datos de julio de 2024, Fitch Ratings y Moody’s han clasificado la deuda de Pemex como Altamente Especulativa, mientras que S&P Global la mantiene en Grado Medio Inferior, aunque con un descenso de un escalón. Específicamente, Moody’s ha degradado a Pemex de ‘Baa3’ a ‘B3’ con perspectiva Negativa, y Fitch Ratings la ha rebajado de ‘BBB+’ a ‘B+’ en el mismo periodo. Fitch y S&P mantienen una perspectiva “Estable”.
Siller destaca que sin un grado de inversión, Pemex enfrenta dificultades significativas para obtener financiamiento, o solo puede acceder a tasas muy altas. Como resultado, la administración de López Obrador ha destinado recursos federales para rescatar a Pemex, incluyendo 952 mil millones de pesos entre 2019 y abril de 2024, de los cuales 561 mil millones se han utilizado para el pago de deuda.
Con una deuda de 101.5 mil millones de dólares al cierre del primer trimestre de 2024, la administración de Claudia Sheinbaum Pardo enfrentará el desafío de recaudar 1 billón 371 mil millones de pesos en aportaciones patrimoniales y reducir el Derecho por la Utilidad Compartida (DUC) para Pemex. Siller subraya que estos recursos deberán complementarse con inversión privada para ser efectivos.