El gobierno ha otorgado a Pemex apoyos fiscales por 1.01 billones de pesos, superando la deuda de 981 mil millones que tienen los Grandes Contribuyentes con el SAT.
Desde 2019 hasta el primer semestre de 2024, el gobierno federal ha brindado a Petróleos Mexicanos (Pemex) apoyos fiscales que ascienden a 1.01 billones de pesos. Estos apoyos, en forma de exenciones y aportaciones patrimoniales, representan recursos que el gobierno no ha recibido, recursos que normalmente financiarían el gasto público.
Este monto supera la deuda acumulada de los Grandes Contribuyentes con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), que asciende a 981 mil 785 millones de pesos. Estos contribuyentes, que son personas o empresas con ingresos anuales superiores a mil 500 millones de pesos, deben al fisco por créditos fiscales vinculados al impago de impuestos, multas o recargos. La deuda de los Grandes Contribuyentes ha aumentado un 260% en términos reales desde 2019, el primer año de gobierno de López Obrador, alcanzando el nivel más alto registrado.
La mayoría de estos adeudos provienen de empresas del sector manufacturero y de servicios profesionales, científicos y técnicos. En contraste, los sectores con menores adeudos incluyen empresas de servicios de esparcimiento, culturales y deportivos, así como de salud y asistencia social.
Los expertos señalan que, con la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia, no se esperan cambios significativos en la política fiscal ni en los apoyos a Pemex. Sheinbaum ha expresado que no planea realizar una reforma fiscal ni dejar de fortalecer a la petrolera estatal.