La mezcla mexicana de petróleo acumuló su segunda caída consecutiva en la semana al perder 2.54% o 1.05 dólares al cotizarse en el mercado internacional en 40.32 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este jueves con una caída del 1.9%, situando el barril en 45.90 dólares por barril.
Mientras precio del barril de petróleo Brent para entrega en mayo terminó hoy en el mercado de futuros de Londres en 49.99 dólares, un 2.23% menos que al finalizar la sesión anterior.
De momento, el recorte en la producción de 1.5 millones de barriles diarios que tendrán lugar en el segundo trimestre del año que en un principio ha acordado la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) durante su reunión en Viena, que durará hasta mañana, no ha parecido contener el miedo ni tampoco el anuncio ha aupado los precios como se esperaba.
Además, durante la cita todos los ojos están puestos en las diferencias mostradas entre Arabia Saudita, que aboga por recortes más profundos, y Rusia, principal socio de la OPEP, que se muestra reacio a ellos.
La mezcla mexicana de petróleo acumuló su segunda caída consecutiva en la semana al perder 2.54% o 1.05 dólares al cotizarse en el mercado internacional en 40.32 dólares por barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex).
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este jueves con una caída del 1.9%, situando el barril en 45.90 dólares por barril.
Mientras precio del barril de petróleo Brent para entrega en mayo terminó hoy en el mercado de futuros de Londres en 49.99 dólares, un 2.23% menos que al finalizar la sesión anterior.
De momento, el recorte en la producción de 1.5 millones de barriles diarios que tendrán lugar en el segundo trimestre del año que en un principio ha acordado la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) durante su reunión en Viena, que durará hasta mañana, no ha parecido contener el miedo ni tampoco el anuncio ha aupado los precios como se esperaba.
Además, durante la cita todos los ojos están puestos en las diferencias mostradas entre Arabia Saudita, que aboga por recortes más profundos, y Rusia, principal socio de la OPEP, que se muestra reacio a ellos.