La AIE revisó a la baja la demanda de petróleo para el 2021, debido a las nuevas restricciones a la movilidad por COVID-19.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha revisado a la baja en 300 mil barriles diarios su estimación de la demanda mundial de petróleo en 2021, que rebotará este año hasta los 96.6 millones de barriles al día, como consecuencia del impacto adverso sobre el consumo de la reintroducción de restricciones y confinamientos en varios países.
Si bien el consumo para este año subirá en 5.5 millones de barriles diarios para alcanzar los 96.6 millones, tras la caída de 8.8 millones en abril del 2020 por la primera ola de COVID-19.
La corrección a la baja de las previsiones se concentra, sobre todo, en los dos primeros trimestres: 600 mil barriles diarios menos de lo estimado el mes pasado en el primero; 300.000 en el segundo; 100 mil en el tercero, y 200 mil en el cuarto.
La agencia considera que el mercado petrolero mundial tiene mejores bases que en 2020, sin embargo, el impacto de la segunda ola provocó que se ajustará a la baja la recuperación de la demanda.
“El despliegue mundial de la vacuna mejora este año los fundamentos, con lo que la oferta y la demanda crecerán tras el derrumbe sin precedentes de 2020” indica la AIE en su informe mensual sobre petróleo.
De acuerdo con el organismo, la recuperación de la demanda a niveles previos a COVID-19 llevará más tiempo en algunos países.
“Será necesario más tiempo para que la demanda petrolera se recupere totalmente, ya que los nuevos confinamientos en varios países pesan sobre la venta de carburantes”, indica la AIE.
Por el lado de la oferta, la AIE estima que la decisión hace unos días de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y de sus socios para reducir todavía más sus bombeos, anticipándose al impacto del repunte epidémico, contribuirá a reducir las reservas acumuladas, que continúan siendo muy superiores a las habituales antes de la crisis.
Si los miembros de la OPEP+ al 100 % esa decisión, esas reservas globales podrían reducirse en 100 millones de barriles en el primer trimestre, lo que equivale a 1.1 millones de barriles diarios.
La AIE revisó a la baja la demanda de petróleo para el 2021, debido a las nuevas restricciones a la movilidad por COVID-19.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) ha revisado a la baja en 300 mil barriles diarios su estimación de la demanda mundial de petróleo en 2021, que rebotará este año hasta los 96.6 millones de barriles al día, como consecuencia del impacto adverso sobre el consumo de la reintroducción de restricciones y confinamientos en varios países.
Si bien el consumo para este año subirá en 5.5 millones de barriles diarios para alcanzar los 96.6 millones, tras la caída de 8.8 millones en abril del 2020 por la primera ola de COVID-19.
La corrección a la baja de las previsiones se concentra, sobre todo, en los dos primeros trimestres: 600 mil barriles diarios menos de lo estimado el mes pasado en el primero; 300.000 en el segundo; 100 mil en el tercero, y 200 mil en el cuarto.
La agencia considera que el mercado petrolero mundial tiene mejores bases que en 2020, sin embargo, el impacto de la segunda ola provocó que se ajustará a la baja la recuperación de la demanda.
“El despliegue mundial de la vacuna mejora este año los fundamentos, con lo que la oferta y la demanda crecerán tras el derrumbe sin precedentes de 2020” indica la AIE en su informe mensual sobre petróleo.
De acuerdo con el organismo, la recuperación de la demanda a niveles previos a COVID-19 llevará más tiempo en algunos países.
“Será necesario más tiempo para que la demanda petrolera se recupere totalmente, ya que los nuevos confinamientos en varios países pesan sobre la venta de carburantes”, indica la AIE.
Por el lado de la oferta, la AIE estima que la decisión hace unos días de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y de sus socios para reducir todavía más sus bombeos, anticipándose al impacto del repunte epidémico, contribuirá a reducir las reservas acumuladas, que continúan siendo muy superiores a las habituales antes de la crisis.
Si los miembros de la OPEP+ al 100 % esa decisión, esas reservas globales podrían reducirse en 100 millones de barriles en el primer trimestre, lo que equivale a 1.1 millones de barriles diarios.