Las ex repúblicas socialistas, Estonia, Letonia y Lituania, anunciaron que dejaron de importar gas natural de Rusia.
Estonia, Letonia y Lituania, han detenido las importaciones de gas natural ruso desde principios de abril, informó la agencia de noticias letona LETA este domingo.
El Ministerio de Energía lituano ya había anunciado ayer la decisión, pero de acuerdo con esta fuente, que cita al presidente del consejo de la empresa operadora en Letonia, JSC Conexus Baltic Grid, también Riga y Tallín se han sumado a este paso.
El sistema de transmisión de gas de Lituania opera sin importaciones gas ruso desde principios de este mes “en respuesta al chantaje ruso a Europa y a la guerra en Ucrania,” informó el Ministerio de Energía en un comunicado ayer por la noche.
El presidente de Conexus, Uldiss Baris, indicó que por la red báltica no ha fluido gas ruso desde el 31 de marzo y que la demanda de Moscú de realizar los pagos en rublos había sido una señal de la necesidad de actuar con rapidez.
“Desde una perspectiva de seguridad, ya no había ninguna confianza,” dijo Baris, que explicó que el suministro se realizará a partir de ahora principalmente a través de la terminal de gas natural licuado (LNG) del puerto lituano de Klaipeda y del depósito de Incukalns en Letonia.
El ministro de Energía lituano, Dainius Kreivys, anunció este sábado que Lituania se había convertido en el primer país europeo en detener las importaciones de gas ruso en respuesta al “chantaje” de Moscú y a la guerra en Ucrania.
De esta forma suman tres países europeos que dejan de depender de las importaciones de gas natural ruso, luego de las amenazas de Putin de que los pagos se deberán de hacer en rublos.