La difícil situación financiera por la que atraviesa Pemex la obliga a realizar algunas acciones internas para mejorar su salud financiera.
Petróleos Mexicanos (Pemex) es la petrolera más endeudada del mundo y por ello, prepara una serie de acciones y políticas internas orientadas a mejorar su salud financiera.
Para el 2022, la empresa productiva del estado reforzará sus políticas de austeridad iniciadas hace dos años, las cuales incluyen venta de activos, recortes de puesto de trabajo y gasto de oficina.
La Subdirección de Capital Humano y la Subdirección de Servicios Corporativos de Pemex tiene planeado este año recortar los beneficios a los empleados de confianza, entre los que se incluyen, quitándoles becas de estudio, eliminar la caja de ahorro, limitando el uso de energía eléctrica y renta de autos y cobrando el uso del comedor ejecutivo.
Reducirán el número de plazas temporales, limitar los viajes de funcionarios tanto dentro como fuera del país y obligar a empleados a desconectar equipos de cómputo y aparatos portátiles cuando termine la jornada laboral.
También se planea reducir los servicios de mensajería, servicio de fotocopiado y gastos de oficina que no sean necesarios.
Además, planea la venta de dos palcos y seis plateas en el Estadio Azteca, así como la venta de 12 membresías del Club de Industriales y 16 del Club de Banqueros.
Mientras que en los servicios de salud, la petrolera prevé la suspensión del beneficio previsto para el reembolso de gastos médicos a funcionarios superiores.