Los precios del petróleo subían más de un 3% el lunes, ya que la decisión de China de reabrir sus fronteras impulsaba las perspectivas de la demanda y eclipsaba los temores de recesión mundial.
El repunte era parte de una recuperación más amplia de la confianza en los activos de riesgo, apoyada tanto por la reapertura del mayor importador de crudo del mundo como por las esperanzas de subidas menos agresivas de las tasas de interés en Estados Unidos basadas en los últimos datos estadounidenses, con las acciones asiáticas al alza y el dólar debilitándose.
El crudo Brent subía 2.46 dólares, o un 3.13%, a 81.03 dólares el barril a las 11:08 GMT, mientras que el crudo estadounidense West Texas Intermediate ganaba 2.51 dólares, o un 3.4%, a 76.28 dólares.
“Si se evita la recesión, la demanda mundial de petróleo y el crecimiento de la demanda seguirán siendo resistentes”, dijo Tamas Varga, del corredor de petróleo PVM, añadiendo que los acontecimientos en China fueron la principal razón de las ganancias del lunes.
“La reapertura gradual de la economía china proporcionará una capa adicional e inconmensurable de apoyo a los precios”, afirmó.
El repunte siguió a una caída la semana pasada de más del 8% para ambos referenciales del petróleo, sus mayores descensos semanales en el inicio de un año desde 2016.
Como parte de una “nueva fase” en la lucha contra el COVID-19, China abrió sus fronteras durante el fin de semana por primera vez en tres años. A nivel nacional, se esperan unos 2 mil millones de viajes durante la temporada del Año Nuevo Lunar, casi el doble que el año pasado y el 70% de los niveles de 2019, según Pekín.
A pesar del repunte del precio del petróleo del lunes, todavía existe la preocupación de que el flujo masivo de viajeros chinos pueda causar otro aumento en las infecciones por COVID, mientras que las preocupaciones económicas más amplias también persisten.
Estas preocupaciones se reflejan en la estructura del mercado del petróleo. Tanto los contratos a corto plazo del Brent como los del crudo estadounidense cotizan con descuento respecto al mes siguiente, una estructura conocida como contango, que suele indicar un sentimiento bajista.
(Reporte de Alex Lawler; reporte adicional de Florence Tan y Jeslyn Lerh; Editado en Español por Ricardo Figueroa)
Los precios del petróleo subían más de un 3% el lunes, ya que la decisión de China de reabrir sus fronteras impulsaba las perspectivas de la demanda y eclipsaba los temores de recesión mundial.
El repunte era parte de una recuperación más amplia de la confianza en los activos de riesgo, apoyada tanto por la reapertura del mayor importador de crudo del mundo como por las esperanzas de subidas menos agresivas de las tasas de interés en Estados Unidos basadas en los últimos datos estadounidenses, con las acciones asiáticas al alza y el dólar debilitándose.
El crudo Brent subía 2.46 dólares, o un 3.13%, a 81.03 dólares el barril a las 11:08 GMT, mientras que el crudo estadounidense West Texas Intermediate ganaba 2.51 dólares, o un 3.4%, a 76.28 dólares.
“Si se evita la recesión, la demanda mundial de petróleo y el crecimiento de la demanda seguirán siendo resistentes”, dijo Tamas Varga, del corredor de petróleo PVM, añadiendo que los acontecimientos en China fueron la principal razón de las ganancias del lunes.
“La reapertura gradual de la economía china proporcionará una capa adicional e inconmensurable de apoyo a los precios”, afirmó.
El repunte siguió a una caída la semana pasada de más del 8% para ambos referenciales del petróleo, sus mayores descensos semanales en el inicio de un año desde 2016.
Como parte de una “nueva fase” en la lucha contra el COVID-19, China abrió sus fronteras durante el fin de semana por primera vez en tres años. A nivel nacional, se esperan unos 2 mil millones de viajes durante la temporada del Año Nuevo Lunar, casi el doble que el año pasado y el 70% de los niveles de 2019, según Pekín.
A pesar del repunte del precio del petróleo del lunes, todavía existe la preocupación de que el flujo masivo de viajeros chinos pueda causar otro aumento en las infecciones por COVID, mientras que las preocupaciones económicas más amplias también persisten.
Estas preocupaciones se reflejan en la estructura del mercado del petróleo. Tanto los contratos a corto plazo del Brent como los del crudo estadounidense cotizan con descuento respecto al mes siguiente, una estructura conocida como contango, que suele indicar un sentimiento bajista.
(Reporte de Alex Lawler; reporte adicional de Florence Tan y Jeslyn Lerh; Editado en Español por Ricardo Figueroa)