Cuba sufre crisis energética con apagones en 40% del país, exacerbando el malestar económico y social, e impulsando protestas.
Cuba se halla inmersa en una severa crisis energética, con pronósticos de interrupciones eléctricas que afectarán a más del 40% del territorio debido a insuficiencias de combustible, fallos técnicos y periodos de mantenimiento, informó la Unión Eléctrica (UNE).
Esta situación exacerba las dificultades económicas y el malestar social en un país ya marcado por una crisis significativa.
A partir de febrero, se han observado déficits en el suministro de electricidad, oscilando entre el 20% y el 45% de la demanda máxima, lo que impacta de manera notable en el día a día y en la economía del país.
Interrupciones programadas del servicio eléctrico han alcanzado hasta 16 horas continuas en varias provincias, y últimamente, incluso La Habana ha sufrido cortes rotativos diarios.
Como respuesta a esta crisis, el gobierno de Cuba ha adoptado medidas de conservación energética, tales como la disminución en un 74% del alumbrado público.
Esta alternativa, si bien ofrece una solución rápida, es de naturaleza temporal, contaminante y onerosa. La continua falta de electricidad ha impulsado la realización de protestas contra el gobierno, siendo las ocurridas el 11 de julio de 2021 las más relevantes de las últimas décadas.