Hoy el precio del WTI para entrega en mayo cayó en más de 300% para quedar en -35 dólares por barril, por primera vez en su historia.
Mientras que los precios del mismo crudo para entrega en junio cerró en 21.41 dólares por barril, a esta es una situación se le llama “contango”, donde los precios de futuros son más altos que los precios spot.
El “contago” señala que hay una sobreoferta de petróleo y una demanda débil, además de que los contratos actuales terminan mañana, provocando que los traders se apresuren a comprar nuevos contratos.
El precio negativo significa que los poseedores del crudo deberán de pagar para que alguien se lo lleve. Esta dinámica económica se asocia comúnmente en el desecho de materiales como la basura.
“Dado el costo de sellar un pozo, un productor estará dispuesto a pagarle a alguien que disponga del barril, lo que implica un precio negativo en áreas sin salida al mar”, dice un análisis de Goldman publicado esta semana.
La caída en negativo del valor del crudo norteamericano se debe a que la capacidad de almacenamiento del petróleo se encuentra muy cerca de alcanzar el límite y podría llegar a ser del 100% si la demanda continúa cayendo.
De hecho, en el sector petrolero reconocen que es “virtualmente imposible” encontrar tanques de almacenamiento disponible en áreas terrestres y que la capacidad de almacenamiento llegará al límite a mediados de año
Las medidas de confinamiento provocadas por el paso de COVID-19 en el mundo ha provocado que el consumo de combustibles se encuentre en su nivel más bajo en la historia, sumando que el consumo de turbosina es prácticamente nulo debido a que las personas no están viajando.
Esto ha provocado que muchas de la refinería a nivel mundial decidiran dejar de procesar crudo debido a que ante la falta de demanda y el poco almacenaje disponible.
Adicionalmente la falta de acuerdo entre Rusia y Arabia Saudita en la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en marzo, provocó que el reino aumentará su producción a 13 millones de barriles diarios en abril, lo cual agravó aún más el exceso de crudo en el mercado internacional este mes.
Hoy el precio del WTI para entrega en mayo cayó en más de 300% para quedar en -35 dólares por barril, por primera vez en su historia.
Mientras que los precios del mismo crudo para entrega en junio cerró en 21.41 dólares por barril, a esta es una situación se le llama “contango”, donde los precios de futuros son más altos que los precios spot.
El “contago” señala que hay una sobreoferta de petróleo y una demanda débil, además de que los contratos actuales terminan mañana, provocando que los traders se apresuren a comprar nuevos contratos.
El precio negativo significa que los poseedores del crudo deberán de pagar para que alguien se lo lleve. Esta dinámica económica se asocia comúnmente en el desecho de materiales como la basura.
“Dado el costo de sellar un pozo, un productor estará dispuesto a pagarle a alguien que disponga del barril, lo que implica un precio negativo en áreas sin salida al mar”, dice un análisis de Goldman publicado esta semana.
La caída en negativo del valor del crudo norteamericano se debe a que la capacidad de almacenamiento del petróleo se encuentra muy cerca de alcanzar el límite y podría llegar a ser del 100% si la demanda continúa cayendo.
De hecho, en el sector petrolero reconocen que es “virtualmente imposible” encontrar tanques de almacenamiento disponible en áreas terrestres y que la capacidad de almacenamiento llegará al límite a mediados de año
Las medidas de confinamiento provocadas por el paso de COVID-19 en el mundo ha provocado que el consumo de combustibles se encuentre en su nivel más bajo en la historia, sumando que el consumo de turbosina es prácticamente nulo debido a que las personas no están viajando.
Esto ha provocado que muchas de la refinería a nivel mundial decidiran dejar de procesar crudo debido a que ante la falta de demanda y el poco almacenaje disponible.
Adicionalmente la falta de acuerdo entre Rusia y Arabia Saudita en la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en marzo, provocó que el reino aumentará su producción a 13 millones de barriles diarios en abril, lo cual agravó aún más el exceso de crudo en el mercado internacional este mes.