Hasta el momento, el incendio en tanques de almacenamiento de combustibles en Cuba ha dejado 16 personas desaparecidas.
Cuba, con la cooperación de México y Venezuela, parecía progresar el domingo en el control de un incendio en su principal instalación de almacenamiento de combustible, que ha ocasionado la muerte de un bombero y ha dejado 16 desaparecidos en medio de las llamas.
Un rayo había caído en viernes sobre uno de los ocho tanques de almacenamiento de combustible en la instalación de Matanzas, situada a unos 130 kilómetros al este de La Habana. Las autoridades han reportado más de 4 mil 500 evacuados en la zona cerca del lugar.
La jefa del Partido Comunista en Matanzas, Susely Morfa, dijo a periodistas locales que “no hay llamas en este momento, solo emana humo blanco”, en alusión al primer tanque de combustible que fue alcanzado por un rayo el viernes último.
El segundo tanque -dijo- todavía está ardiendo, mientras que un tercero, que los funcionarios temían que explotara el sábado por la noche, “se está enfriando con agua a intervalos, con el propósito de mantener una adecuada temperatura que impida la combustión de los gases”.
Más de 100 personas, muchos de ellos socorristas, resultaron heridos -principalmente por la segunda explosión- de las cuales 24 permanecen hospitalizadas, cinco en estado crítico, según las autoridades sanitarias locales.
“Estamos enfrentando un evento que no es casual en el país. Es un incendio de alta proporción (…), muy difícil de controlar en Cuba donde no hay todos los medios que se requieren, no hay toda la tecnología y por tanto estamos contando con asesoría técnica (…)”, dijo el presidente Miguel Díaz-Canel.
“La ayuda es importante, diría que es vital y va a ser decisiva (…)”, dijo a la televisión estatal.
Personal militar y civil de México, así como bomberos y técnicos de Venezuela, con experiencia en manejo de incendios provocados por combustible, están cooperando con el personal cubano y han transportado espuma, equipamientos y otros productos químicos retardantes de fuego para controlar el siniestro que aún se propaga.
Jorge Piñón, director del Programa de Energía y Medio Ambiente de América Latina y el Caribe de la Universidad de Texas, en Austin, dijo que cada tanque en la instalación podría almacenar 300 mil barriles y proporcionar combustible a las plantas eléctricas.
Cuba ha estado sufriendo apagones diarios y escasez de combustible. Es probable que la pérdida de combustible y capacidad de almacenamiento agrave la situación que ha dado lugar a pequeñas protestas locales en los últimos meses.
(Reporte de Nelson Acosta y Marc Frank; reporte adicional de Deisy Buitrago en Caracas. Editado por Marion Giraldo REUTERS NAB MG/)